viernes, 9 de mayo de 2014

AVIACIÓN AGROFORESTAL – 014

 

30 03 00 00

Equipos externos (solo helicópteros)

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(Ejemplo de Carta para Anfibios, sacado de la GUIA REPSOL AVIATION de Castilla y León , es el mismo sistema para otras aeronaves)

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Puntos de Agua Provincia UTM Geográficas
Valparaiso Zamora 29T 07 25 393 - 46 52 464 N 41º 59' 31" / W 005º 16' 44"
       

EXTINCIÓN DE INCENDIOS FORESTALES

LANZAMIENTO DE AGUA

(HELICÓPTERO)

En las zonas de actuación, normalmente se encuentran una serie de puntos de carga de agua y que suelen estar registrados e inventariados con su ubicación.

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A la llegada a la base desde la que se va a operar, el Comandante, debe pedir el listado de puntos de agua de la zona de influencia de la base, que seguramente tendrán a disposición de quien pueda necesitarla. Si en el transcurso de la campaña se encuentra alguno que no esté inventariado, debe ubicarse su posición en coordenadas, sus características y limitaciones y entregar esta información para que esté a disposición y pueda ser útil a otro piloto que venga a la zona.

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Cuando las cargas de agua se efectúen en el mar, se buscará un lugar despejado de personas y embarcaciones y cerca de la orilla, si la carga es con equipo de carga ventral, es importante que se constate suficiente profundidad, para que la bomba de aspiración, no aspire arena o piedras, ni se enganche en roca alguna y si es con Helibalde, por supuesto, como en el anterior caso, mucho cuidado con quedar enganchados en rocas del fondo.

Para cargar en balsas agrícolas, abrevaderos de animales, etc., debe recabarse un permiso del Centro Operativo o de Coordinación de incendios, haciendo hincapié en que es una balsa que sirve de abrevadero, una vez terminada la operación, debe manifestarse la cantidad de agua que se ha utilizado, para reponerla y por si hubiera reclamación alguna por parte del propietario.

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El Comandante de la aeronave, debe hacer un informe de cada punto de agua que vaya a utilizar y en el que encuentre dificultades, sean del tipo que sean, en el transcurso de las operaciones de extinción, nos encontraremos con sorpresas inesperadas en cuanto al tema de puntos de abastecimiento de agua, que irán desde, no poder entrar porque cruza el punto una línea eléctrica, lo circundan árboles, entre los que no cabe el helicóptero, que son agujeros de antiguas canteras donde tampoco cabe la aeronave, altos obstáculos imposibles de sobrevolar a la salida del agua, etc. etc.

Es siempre, vital y de capital importancia, en la extinción de un incendio forestal, la frecuencia de descargas.

A veces, se encuentran piscinas privadas, agrícolas, pequeños charcos, arroyos, etc., puntos de agua, en muchas ocasiones inaprovechables por parte del helicóptero, bien por los obstáculos que los rodean, cables que los cruzan o escaso caudal e imposibilidad de aspirar el agua que contiene o porque su profundidad es poca, también la suciedad del agua o mucho barro en el fondo.

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Este punto cercano al incendio, nos permitiría incrementar el número de descargas, en un 100%. Sin embargo estos pequeños o inaccesibles puntos, pueden ser utilizados colocando pequeñas piscinas auxiliares, una bomba de aspiración y una manguera, que trasvasen el agua desde el punto y sitúen, de esta forma al helicóptero fuera del área confinada y que permitan sumergir el mangote del helicóptero en un fondo de agua suficiente.

Estos pequeños y complicados puntos de agua, pueden convertirse en aprovechables y hacer más efectiva la operación al disponer de de agua a escasos metros del incendio.

Por otro lado, en zonas donde serpentea un río, es muy fácil hacer, este caudal, operativo para su utilización en incendios, se trata de practicar, antes de que llegue la época de los incendios, unos huecos entre los árboles que les rodean, la distancia entre estos puntos, dependerá siempre de la necesidad o peligro estimado para la zona.

Esto disminuiría el tiempo de actuación en traslados desde el incendio al punto de agua y su regreso.

Este cometido puede realizarse mediante dos sistemas, que si bien guardan una similitud en cuanto a la operación general de la aeronave, no son a la hora de la operación en sí, nada parecidos. Los referidos sistemas son:

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a) El Bamby Bucket o Helibalde, es un cesto que sujeto por cables o varillas, se lleva colgando de un gancho de carga debajo del helicóptero. Su llenado es por inmersión directa en el agua, el piloto puede vaciarlo con un control desde la cabina, que libera un sistema inercial, produciendo la descarga.

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a) El otro sistema utilizado es mediante lanzamiento de agua desde un tanque que va adosado y sujeto a la parte inferior de la aeronave, dicho tanque está provisto de una manguera que cuelga de él y que en su base tiene una bomba para succionar el agua, el tanque dispone de unas compuertas que controla el piloto desde la cabina.

1.- Generalidades

Las aeronaves dedicadas a esta actividad, habrán de estar debidamente homologadas y disponer de la pertinente autorización para la realización de los trabajos.

2.- Limitaciones de vuelo

En este punto se estará a lo establecido en el M.V.A., en la normativa aérea vigente y condiciones meteorológicas.

En este tipo de trabajo, aunque en ninguno debe de ser, nunca se sobrepasarán los límites de carga, ni la VNE que corresponda por las condiciones del vuelo y las meteorológicas.

-Mecánicas

Vienen dadas por los límites operativos especificados en el Manual del equipo que se tenga instalado.

-Meteorológicas

Habrá de tenerse en cuenta toda influencia que pueda recibir la aeronave en el transcurso de su vuelo, las condiciones meteorológicas, generalmente, no son las generales de la zona, el incendio provoca un micro clima de tipo ciclónico, con fuertes vórtices a tener muy en cuenta, sobretodo en lo concerniente a limitaciones, la turbulencia provocará unas cargas a la estructura y a las superficies sustentadoras que pueden hacer ingobernable la aeronave, aunque sea durante unos instantes, pero estos instantes, no debe olvidarse que nos afectan en un vuelo a baja cota o sea, cerca del suelo, con obstáculos o entre paredes.

PROGRAMA DE ENTRENAMIENTO

1.- Para habilitación de tipo.

Cualquier miembro de una tripulación, debe estar habilitado en el tipo de aeronave en la que va a desempeñar un trabajo a bordo. Si cambia de aeronave y es necesaria una nueva habilitación, deberá obtenerla antes de poder ejercer de tripulante. Esta habilitación será impartida por instructores autorizados por la Dirección General de Aviación Civil.

2.- Para rehabilitación de tipo.

Los miembros de la tripulación de una aeronave, estarán sujetos a entrenamientos y verificaciones periódicas, debidamente autorizadas y supervisadas por personal autorizado por la DGAC. En estas prácticas, se llevarán a cabo, operaciones normales y de emergencia.

3.- Iniciación a la especialización.

En algunas especialidades de aviación se realizan cursos de adaptación al tipo de operación. La aviación agroforestal, es la primera que ha entrado en este apartado. El curso para la habilitación de piloto agroforestal, es el que regula las buenas maneras de efectuar este trabajo.

4.- Reciclaje periódico.

Las empresas deben mantener un registro de los programas de entrenamiento y verificación de competencia de sus tripulaciones, también de los cursos que han impartido.

5.- Entrenamiento pre-campaña.

Realmente, en la aviación agrícola, no hay un principio de campaña, pues el periodo de trabajo va siguiendo diferentes cultivos a lo largo del año y por tanto no hay principio y fin, ni períodos de descanso lo suficientemente largos, como para tener que entrenarse antes; en todo caso, sí es necesario un reciclaje de vez en cuando para subsanar vicios que se puedan haber adquirido.

Antes de empezar una campaña de incendios, sí hay que entrenarse, pues, si no se hacen las campañas del norte y las del cono sur, existe un período de inactividad en la especialidad, que hace necesario este entrenamiento.

De momento me voy de vacaciones, espero la vuelta con ansia, ...el aviador